LISTA DE LAS CONDUCTAS Y SIGNOS QUE NOS DEBERÍAN ALERTAR:
24-36 Meses:
No construye frases de dos palabras.
No aumenta su vocabulario de forma regular.
No mastica adecuadamente.
No construye frases de tres o más elementos.
No utiliza verbos.
No hace preguntas.
36-48 Meses:
No utiliza oraciones complejas.
Cambia rápidamente de una actividad a otra sin entrar realmente en ninguna.
No interacciona con otros niños.
No pronuncia bien muchos sonidos y su habla sólo la entienden las personas de su entorno más cercano.
48-60 Meses:
Tartamudea.
No pronuncia muchos sonidos. Es normal que no pronuncie la R, RR, L, Z que se adquieren más tarde, pero si el resto de los sonidos.
No reacciona a ruidos repentinos.
No muestra interés por el entorno.
Evita el contacto ocular.
Deja de aprender cosas nuevas o se produce un retraso olvidando lo que aprenden.
No sonríe socialmente o no responde a la sonrisa de la madre.
No tolera los cambios y tiene rabietas muy frecuentes.
A nivel de aprendizaje del lenguaje escrito, se consideran factores de riesgo:
Si presenta dificultades de habla y/o lenguaje.
Si presenta conductas de inadaptación en las tareas de grupo (falta de atención, hiperactividad, pasividad, etc.).
Si presenta dificultades perceptivas manifiestas, observables en el dibujo o los juegos sensoriales (clasificación,..).
Si presentan retrasos psicomotores, especialmente en motricidad fina, observables en la aprehensión de los objetos, los trabajos manuales, las actividades de psicomotricidad, etc.
Presentan antecedentes familiares en padres y/o hermanos.