Aumenta mi capacidad de abstracción, esto hace que sea capaz de leer, escribir, que pueda entender ideas que no son tangibles, como el tiempo, la felicidad o la justicia y que empiece a entender el punto de vista del otro.
Voy a preguntar el por qué de todo. Es la edad del saber. Quiero saber las razones de las cosas.
Tengo más fuerza, más equilibrio y mayor habilidad manual.
Me interesan más los estudios y, también, los amigos, el deporte y los juegos.
Acepto las reglas de los juegos y los valores de grupo.
Deseo agradar tanto a los adultos como a mis compañeros.
Empiezo a tomar como modelos, también, a otros adultos del mismo sexo.